Una pareja, ambos amantes de la gastronomía, tienen una cita tras contactar a través de una app para amantes de la comida. Ella y él comienzan a conocerse, con las dudas típicas de los primeros pasos de una posible relación, visitando diversos restaurantes, con la incertidumbre del presente y el recuerdo de las heridas sentimentales causadas por relaciones anteriores. El sabor amargo de una relación puede durar mucho tiempo, pero siempre hay un plato nuevo por descubrir, y entonces las emociones vuelven. Miedo, deseo, embriaguez. El amor, como la cocina, es lanzarse al vacío con los ojos cerrados.